"-Japón es un país antiguo, ¿sabes? Su ley es antigua: dice que existen doce crímenes por los cuales resulta lícito condenar a un hombre a muerte. Y uno es llevar un mensaje de amor de su ama.
Hervé Joncour no apartó los ojos del chiquillo asesinado.
-No llevaba mensajes de amor con él.
-Él era un mensaje de amor."
(Seda, Alessandro Baricco)
Hervé Joncour no apartó los ojos del chiquillo asesinado.
-No llevaba mensajes de amor con él.
-Él era un mensaje de amor."
(Seda, Alessandro Baricco)
No tiro ninguna botella con un mensaje al mar. Yo soy la botella.
2 comentarios:
A veces también somos el mensaje.
Y mientras viajamos, nos dormimos y soñamos que somos simplemente el destinatario del mensaje.
Hermoso.
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