Las Confesiones sin San Agustín
Mariconeadas como las del santo
sábado, 12 de junio de 2010
342
Ah, la ciencia a ambos lados de nuestras vidas...
Son como granitos de arena que pretendemos capaces de sostener la soga sobre la que estamos suspendidos. ¿Cómo podía ser que la soga no cediera?
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