miércoles, 26 de noviembre de 2008

78

Desde que comencé a alejarme del mundo conjugo en pretéritos cada vez con mayor frecuencia el verbo querer.

martes, 25 de noviembre de 2008

77

-Deberías rehacer tu vida.
-¿Rehacerla? Si recién la estoy empezando...

domingo, 23 de noviembre de 2008

76

El amor, sus dolores. Vivo el sufrimiento por amor como algo fatal. En mi cabeza y en los sentimientos, la posibilidad de que el amor se aleje, así sea por un instante, aparece como algo insuperable, una angustia monárquica, totalitaria, asesina, un dolor que no puede ser pisoteado por otro dolor.
Entonces me sirvo un vaso de ron helado y al tomarlo me hace arder la garganta. Prueba irrefutablemente que algo más de dolor puede tolerarse, que a la cima anterior de los padecimientos aún se la puede sobrepasar, que quedan tristezas por conocer. Una confirmación necesaria de que todavía se puede estar peor, quizás, como mecanismo para garantizar la subsistencia. Un aviso: todavía tu camino puede malograrse aún más, tu saber es insuficiente para justificar tu propia extinción...

sábado, 22 de noviembre de 2008

75 - Marxamor

Cuando uno es proletario del amor le canta a lo que no tiene. Busca la dictadura de uno mismo sobre una mujer, una acaparadora del amor.
¡Ah, salto! Cuando se toma el poder, uno ya es un burgués en el amor. Ahí es cuando se empieza a sentir el miedo a perder eso tan preciado, y acuden a uno los trastornos psicológicos.

(quizás lo peor sea la amenaza de otros proletarios)

martes, 18 de noviembre de 2008

74

La belleza nos es dulce porque el ritmo voluble de su danza es el de nuestras vidas. La sabiduría nos es cara porque no tenemos tiempo de completarla.
(Rabindranath Tagore)

¿Todo el arte tiene que gustar? Bien, puede que sometiéndose a ciertos criterios instituídos, sí. Por tal o cual razonamiento, hecho por tal o cual crítico/intérprete/lector/whatever, quizás llegue a convencer cualquier objeto, y por objeto me refiero a "lo que se expone", y no a algo explícitamente tangible. Pero eso a mí no me responde. ¿No puede existir un artista que no guste, o incluso un movimiento entero? ¿Entenderlo implica necesariamente darle una valoración positiva, es decir, el entendimiento conlleva obligadamente al goce, ya sea mediante los sentidos o el intelecto?
Yo creo que no. No veo por qué eso habría de ser así. Hay tipos/as que no me gustan. Después de todo, no es algo permanente y de un momento al otro puede de alguna manera comenzar a gustarme algo/alguien, o dejar de hacerlo, claro. Ante situaciones así me mueve una suerte de empirismo. Puedo llevar a cabo una experiencia la cantidad de veces que me plazca y no encuentro contradicción entre que algo me guste en un momento y en otro no.
Por otra parte, no me imagino la cantidad de artistas que aceptaron ciertas lecturas porque salían beneficiados con eso que no buscaron intencionalmente, ni consentían en su fuero interno, si tenían... lo cual, ¿qué tendría de malo?

lunes, 17 de noviembre de 2008

73

-Así que sos poeta... ¿por qué lo decís?
-Porque veo mis tristezas distintas de las demás.
-¿Y lo son?
-No sé, y no me importa.

domingo, 16 de noviembre de 2008

72

Si se quieren caer las estrellas, la luna, las nubes, los pájaros, el viento, la nieve de la cima de una montaña, un rayo de sol, el sol, o cualquier cosa, que se caigan. Que se caigan encima mío.

sábado, 15 de noviembre de 2008

71

Entiendo que una vida se torne vulnerable frente a otra mientras éstas se mantengan expresamente ligadas. Lo curioso es que cuando se echa pólvora sobre el nexo queriendo hacerlo volar, y se lo ve volar, la vulnerabilidad persiste. Es como una falencia de la naturaleza para retornarnos la inmunidad perdida en algún momento oscuro del pasado.

viernes, 14 de noviembre de 2008

70 - (anticipación)

fragmento de una carta
que recibe Pio en estos días

Puede que el amor a la nada tenga que ver con la apreciación concreta de la unicidad de lo simple, de la infinita capacidad emotiva de todo aquello despojado de adornos.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

69

Un choque tiene la suerte de representar sólo un golpe y un dolor posterior. Uno no "está chocando" durante una determinada cantidad de tiempo; no se ha chocado, se choca, se chocó.
No poder decir lo que se quiere decir... ¿cómo se aguanta?
Es como un choque duradero, una contradicción semántica de la existencia...

domingo, 9 de noviembre de 2008

68 - Elogio del silencio

Visto que tantas veces estudiamos lo que no hacemos, lo que no haríamos, o en lo que evitaríamos convertirnos, quizás una persona que se luzca en el arte de desvanecerse pueda contar mucho de la subsistencia hermosa o sobre la delicada presencia alegre de quienes no notan cómo las agujas del reloj los van descamando. Una persona viva habla de la vida, desde adentro, sin poder juzgar desde la científica distancia, y de la muerte, desconociéndola. Una persona muerta habla de la vida desde la memoria, a mil trechos oscuros alejado, sujeto a cuanta alucinación se le cruce, y de la muerte, viviéndola, como hablando de la lata opaca en la que la sardina está encerrada, sin poder ver la etiqueta, en el mejor caso comparándola con su recuerdo borroso de lo que fue la vida. Finalmente, ¿de qué se puede hablar sin caer en el ridículo?

67

Nadie es menos necesario que Borges.

viernes, 7 de noviembre de 2008

66 - Intervalo doloroso*

Ese amanecer iba caminando y viendo cuántas cosas horribles pasaban en el mundo. Justo cuando iba a morir cerré los ojos y me dormí. Todo había sido la realidad.


*el título es de Pessoa

64

Muchas veces en los lugares públicos finjo tener un estado de ánimo promedio o alegre, como concediéndole un valor elevado a la tristeza, que sería lo más idóneo de representar en la cara. Como si la multitud no tuviera suficientes medios para pagar por la apreciación de mi tristeza...

65

La palabra renuncia me hace pensar en dejar de hacer algo que previamente una persona eligió hacer. ¿Cuál es la palabra para dejar algo que no se eligió?

63

En cierta medida, escribir puede ser un motor para dejar de sufrir las consecuencias negativas de pensar. Cuando se sucede en mí un remolino de meditaciones, inconexas salvo en la justificación que dan a las ansias dejar de existir al menos por unos minutos, muchas veces me retiro a la escritura. Hacerlo me mantiene concentrado en una sola de esas cuchillas. Es como si me persiguiesen mil espadachines y por iniciativa propia me resguardara en el pórtico de mi cueva: no es la salvación, pero sabiendo que desde atrás no voy a recibir ataques, me resigno a enfrentarlos uno a uno, sabiendo que mis energías son ínfimas frente a las de la fuerza enemiga.

jueves, 6 de noviembre de 2008

62

Un verdadero dios... ¿se tomaría el trabajo de hacer un paraíso para que la gente se muera?
A ese invento con constancia en el tiempo preferiría llamarlo tecnología mental. Es un aparatito que, después de inventarlo, fueron volviendo un poco más ergonómico a medida que ya su uso provocaba ampollas en las manos. Tiene asideras en Roma y se puede usar con la mano derecha o la izquierda, trae su caja con sus partes intercambiables. Falta la advertencia a los menores de edad que puede intoxicarse si lo ingiere, o se lo mete por la nariz o las orejas...

miércoles, 5 de noviembre de 2008

61

La seriedad con que una persona se pregunte si la vida vale la pena se ve reflejada en la complejidad que encuentre para responderse a sí mismo.

lunes, 3 de noviembre de 2008

60

Pessoa, o la utilidad de que te aclaren qué es inútil...

domingo, 2 de noviembre de 2008

59

Me imagino cómo se burlaría del catolicismo un inmortal desde su condición de extranjero a la muerte, inmune a los juicios divinos.

58

¿Por qué Baudelaire? Porque enseña a despreciar con clase...

sábado, 1 de noviembre de 2008

57 - Cautela

Apuesto que apuesto...

56

-Amor, ¿¡dónde estás!?
-Acá, muerte, ¿¡dónde te encuentro ahora!?

55

Pensar con fuerza en el suicidio, como empujándolo a salir de uno, es la manera de que cada día tenga valor por sí mismo y no en conjunto. Darle un status elevado a cada día singular, aunque la división entre uno y otro sea convención. Hacer llorar al suicidio de tanto aplastarlo contra los bordes de la piel de la contención, mostrarle la llave de la cárcel donde está encerrado y desde adentro presionarlo a pasar entre los barrotes ayudándolo y haciéndole doler a la vez. El día como acercamiento a la liberación del pobre suicidio...